Cuando hacemos una lista de propósitos, ya sea en enero o en septiembre, uno de ello tendría que ser, sin duda, aquel de amarse a uno mismo.
Cuando empiezas a escuchar esto de amarte por primera vez, pueden surgir muchas dudas. Cosa que, si lo piensas, es increíble, porque todos sabemos cómo amar a otras personas. Pero lo de amarse a uno mismo es algo que suena medio raro, ¿no te parece?
Índice de contenidos
¿En qué consiste amarse a uno mismo?
Una vez que entendemos que estamos en un momento bueno para hacer cosas diferentes, volvamos al tema principal de este artículo, que no es otro que el de amarse a uno mismo.
¿Qué quiere decir esto de amarse a uno mismo? Básicamente, de lo que se trata es de darle a tu persona el cuidado, atención, cariño y valoración que mereces. La misma que te gustaría que otras personas te dieran.
Aquella que das tú a quienes amas de verdad. Esos sentimientos de aprecio máximo que puedes tenerle a tu pareja, madre, hermano, hijo… pero enfocado a tu persona.
Estoy seguro de que más de uno, al leer esto, se dirá <<eso es imposible>> o <<yo ni de lejos me amo así>>.
Sí, lo sé, no es algo que de primeras nos llene. De hecho, nos suena hasta raro. Pero la realidad es que debería ser lo más normal del mundo. Algo que tendrían que enseñarnos en la escuela para así, formar personas con un fuerte sentimiento de valoración personal, amor propio y autoestima.
Hoy en día, todas estas características les son muy ajenas a la mayoría de las personas. Y así ocurre en el mundo, que se encuentra lleno de individuos que buscan en los demás aquello que no se dan a sí mismos.
Porque eso es lo que ocurre cuando no te amas, que esperaras -de forma inconsciente de manera general- que otro lo haga por ti, para llenar ese hueco o espacio vacío que sientes en tu interior.
Y de ahí viene lo de las medias naranjas, donde se supone que dos mitades se han de encontrar y juntar para así, formar una parte completa.
Una auténtica estupidez y aberración contra el amor propio y reconocimiento personal.
Tú ya eres alguien completo. No necesitas de nadie más para complementarte y así sentirte lleno.
¿Por qué creemos que nos hace falta alguien más para sentirnos completos?
De forma instintiva, buscamos llenar los huecosemocionales que tenemos en nuestro interior, las carencias, por el camino fácil. Lo cual es buscando fuera, en lo externo, cosas con las que aliviarnos de alguna forma.
Es por ello que aparecen los comportamientos compulsivos, tales como la comida, el sexo, las drogas, el alcohol, las compras… Todo ello aporta placer a corto plazo, lo cual supone ese alivio o válvula de escape para el vacío que se siente en el interior.
Puede que lo sientas -el vacío- o no. Pero si tienes alguna de estas u otras adicciones, te aseguro que está. Porque las adicciones son justamente eso: válvulas de escape para aportarle a la vida esa especie de sal y pimientaque hace que ésta sea menos aburrida, más emocionante. Agregando una descarga de químicos en nuestro cuerpo a los cuales nos volvemos adictos.
Curiosamente, cuando las personas dejan de mirar afuera y observan donde realmente está el problema, en el interior, una vez sanado éste, la adicción desaparece. Es trascendida, pues ya no tiene sentido mantenerla. De hecho, la rechazan porque entienden que es perjudicial para sí mismas.
La adicción a las personas es una válvula de escape más. Muchas son incapaces de estar en soledad, consigo mismas, pues el dolor interior que sienten se hace tan notable, que rápidamente buscan una persona con quien estar.
Y así, salta de relación, pues tener una pareja romántica puede hacernos recibir, de alguna manera, ese amor que nos falta y que podría sanar aquellas carencias que tenemos dentro de nosotros mismos.
Pero no, no estás incompleto. Ni estás hecho para que aparezca alguien que le dé sentido a tu vida en el amor. Lo único que te falta es darte tú los cuidados que necesitas para empezar a sanar.
Y aunque quizás haya temas del pasado cuya resolución pueda implicar a terceros, al final todo queda en ti mismo. Esto es tan cierto, que tú podrías arreglar un problema que tienes con otra persona, si dentro de ti mismo encuentras la comprensión y el perdón necesarios para sanar esa situación.
Por experiencia propia y de otros casos que conozco, he comprobado esto. Y cómo dos personas que no se hablaban desde hace tiempo, si una realiza un proceso interno de sanación de ese problema, la vida hace que estos dos seres vuelvan a encontrarse y la tensión se ha suavizado, pudiendo relacionarse desde una posición más cordial y amigable.
Parece mágico cuando lo vives.
Cómo amarse a uno mismo
Todas las heridas del pasado que arrastramos, pueden habernos creado un fuerte sentimiento de desvalorización personal. Podemos tener una imagen pésima respecto a nosotros mismos, nuestra valía y lo que somos capaces de realizar.
Déjame preguntarte una cosa, que tal vez al leerla pueda dolerte: ¿estarías con alguien como tú?Y me refiero al punto en el cual tú te conoces. No la imagen que das a los demás, la cual sabes muy bien que está manipulada.
Me refiero a esa persona que sabes que eres internamente. Sin máscaras, adornos ni maquillaje.
Si la respuesta es ‘no’, tienes un gran trabajo que hacer.
Si la respuesta es ‘tal vez’, tienes un gran trabajo que hacer.
Si la respuesta es ‘sin duda que sí’, felicidades por la valoración personal que tienes de ti mismo. Aunque, por desgracia, esto no suele ser lo habitual.
Y no lo es porque nos han machacado mucho en el pasado. Y lo que es peor: nos machacamos mucho nosotros mismos. Nos hemos convertido en nuestro peor enemigo. Peor que cualquier juez implacable que nos mirase con lupa y sentencia por toda esa gran cantidad de errores que -equivocadamente- creemos que tenemos.
Si quieres comenzar a hacer eso de amarse a uno mismo, te dejaré a continuación una serie de consejos sobre cosas que puedes empezar a hacer desde hoy mismo, tengas la situación que sea en tu vida.
Algo totalmente práctico y funcional.
La relación entre la autoestima y amarse a uno mismo
La autoestima no es más que una emoción. Y como tal, puede ir y venir.
Habrá momentos en nuestra vida donde sea más fuerte. Otros, más flojo. Y ello es lógico, porque al igual que hay momentos donde sentimos un amor muy grande por una persona, en otros no lo es tanto.
Y ojo, que aquí voy a hacer una aclaración. No es lo mismo un sentimiento que una emoción. Yo puedo sentir -sentimiento- amor por alguien, y eso siempre va a estar. Pero la emoción que tenga en un momento dado hacia esa persona, es variable; y esto se entiende al pensar en la emoción como, por ejemplo, la euforia, el ímpetu, la ilusión.
Son emociones que se viven de forma intensa en un momento dado. Y no se mantienen siempre en el tiempo, pues dependen de muchos factores.
Con la autoestima sucede igual. Es una emoción que puede tener menor o mayor intensidad en distintos momentos. Pero lo que no cambia nunca es la valorización que hacemos de nuestra persona. Y el amor que nos tenemos, depende en gran medida de ello.
Valorarte es reconocer todas esas partes buenas y positivas que tienes. Y va mucho más allá de <<soy una buena persona>>. Eso es abstracto y a nadie, realmente, aporta.
Si no conoces tu valía personal, te aconsejo que guardes un momento para ti, agarres papel y lápiz y realices un trabajo de introspección, para que veas en ti todas esas cosas de valor que te caracterizan. Lo cual significa mirar dentro de ti y reconocerlas.
Te ofrezco una lista de ejemplo:
- Siempre que me he propuesto hacer algo, lo he sacado adelante, aunque no tuviera la formación ni la práctica necesarias. Aunque tuviera miedo. Pero recuerdo tal o cual momento en mi vida donde me dije <<a por ello, voy a hacerlo>> y salí airoso, demostrándome que era muy capaz.
- Tal vez Fulanito, Menganita, Bradd Pitt o Beyonce sean muy bellos y hermosos. Pero eso no significa que yo sea feo. Y mi valía va más allá del físico. Mi valor personal es todo lo bonito, hermoso y de gran capacidad que hay en mi interior. La belleza física es fugaz, y quien sólo valora eso, no sabe apreciar de verdad a las personas. Alguien así no me conviene, porque jamás me valorará de verdad.
- La valía de los demás no resta la mía. Compararme con otras personas porque yo las vea muy competentes y las tenga en un pedestal, no significa que yo no sirva para nada. He demostrado en mi vida que he hecho cosas valiosas, he cumplido metas propuestas, he llegado a objetivos. He demostrado que soy muy valioso y capaz.
Vales mucho más de lo que piensas. Y si haces una lista de tus características que en el pasado te han aportado valor, sabrás que es así. Si, además, dejas de lado el absurdo e inútil vicio de compararte con los demás, reconocerás aún más tu valor.
Y lo más importante: los juicios que tienes contra ti mismo no son más que interpretaciones erróneas que tienes respecto a tu persona. Que no seas bueno en algo no significa que no seas bueno en nada. Que tal persona haga algo mejor que tú, no significa que tú lo hagas mal o que no puedas hacer otras cosas de manera brillante.
Valora lo que tienes. Deja a los demás con su vida. Enfócate en tu persona, que es maravillosa.
Y repasa con regularidad la lista de tu valor personal, esa que acabas de hacer. Durante un tiempo será necesario que la mires prácticamente a diario, para no olvidarlo. Este es el primero de tus deberes.
Por qué es tan importante amarse a uno mismo
Casi en la totalidad de las situaciones, las otras personas nos dañan porque nosotros lo permitimos. Hay una frase popular que ilustra esto muy bien: “dos no pelean si uno no quiere”.
Si mi pareja me miente y engaña, lo hará mientras que yo se lo permita, lo cual significa que ocurrirá mientras que siga a su lado y yo no le haga ver que esos comportamientos tienen sus consecuencias.
Si mi madre, padre, hermano o alguien íntimo abusa de su situación de cercanía emocional, lo hará mientras que yo no marque la líneade la que no puede pasar. Y le diga: <<te quiero con todo mi corazón, pero a partir de este punto ya estás utilizando nuestro cariño personal en tu beneficio propio, sin importarte lo que yo sienta. Y eso no lo puedo permitir>>.
Si mi jefe cada vez me habla peor, me manda más trabajo y me trata mal, lo hará mientras que yo no le diga que su posición laboral no le da permiso ni el poder de abusar de mí y faltarme el respeto.
Sé que estas situaciones son complicadas, y podremos encontrar un montón de excusas para no marcar límites y decirle ‘no’ a otra persona. Pero eso no es más que la debilidad personal y lo que nos decimos a nosotros mismos para no hacerlo y enfrentar la situación.
Porque que yo le marque un límite a mi madre no significa que deje de quererla, sino más bien que yo me quiero y respeto, y no voy a permitir que abusen de mí. Esto es extensible a cualquier otra relación existente, del contexto que sea.
Cuándo amarse a uno mismo
Amarse a uno mismo pasa, irremediablemente, por el trato que nos damos. Y eso incluye tanto el aspecto físico como el emocional.
Cuidarse es uno de los mayores actos de amor propio que podemos realizar. Y eso no es egoísmo. Es respetarse, tratarse bien.
Esto ayudará a sentirse bien con uno mismo, lo cual influye en poder vivir en paz. Si te pones a pensar en ello, aquellas épocas donde comprometerse con el cuidado personal fue una de tus prioridades, todo iba mejor en tu vida. O al menos, encarabas los asuntos de manera diferente.
En lo que al cuidado del físico se refiere, se trata de darle a tu cuerpo lo mejor posible para él mismo. Te va a acompañar toda la vida. Es tu vehículo, sin el cual no podrás avanzar ni tener una existencia digna.
Si atiborras a tu cuerpo con comida basura porque satisfaces así alguna necesidad, el mensaje que te envías es el siguiente: <<cuerpo, no te quiero nada, te lleno de basura, búscate la vida, me da igual lo que te ocurra con tal de sentirme yo bien>>.
Demos gracias a que nuestra maravillosa maquinariabiológica hace a la perfección su trabajo y es capaz de procesar los ataques que le hacemos. Pero si quieres empezar a amarte de verdad, comienza a amar tu cuerpo.
Dale comida buena, aunque puedas tener un capricho de vez en cuando. Pero que éste -el capricho- no sea lo habitual y regular, sino algo anecdótico que puedas, por ejemplo, hacer una vez en fin de semana.
Muévete, haz algo de ejercicio. Un coche si no se mueve y está siempre aparcado, terminará por desgastarse -la batería, por ejemplo- y no funcionará cuando necesites usarlo. Con el cuerpo no es tan radical, mucho has de dejarle quieto. Pero todo el movimiento que le des se transformará en salud, pues mantendrá tu organismo funcionando. Es, mediante la acción, como obtiene sentido su propósito.
Cuida tus pensamientos. De nada, absolutamente nada, te sirve decirte cosas malas. No vas a solucionar nada con ello. No sanarás el pasado ni resolverás el futuro. Tampoco mejorarás el presente por machacarte, decirte lo inútil o inservible que eres, la poca fuerza de voluntad que tienes, lo feo que estás o lo más que hiciste en aquella situación.
Sin embargo, pensar objetivamente, aprender de los errores, marcarse propósitos y tener la intención de superarse y cumplir las metas propuestas, sí que son pensamientos que no solo te harán bien a ti, personalmente, sino que tendrán una auténtica utilidad y significado.
Conclusiones
Amarse a uno mismo es algo que podemos comenzar a hacer en este preciso momento, con unos pequeños pero importantes cambios. Se basa en el respeto por uno mismo, lo cual comienza por cómo nos tratamos, el valor que reconocemos en nosotros y en cómo permitimos que otros nos traten.
Construir una valoración personal nueva no se logra de la noche a la mañana. Al igual que has tardado años en meterte en el pozoen el que te encuentras, tardarás un tiempo en salir. No el mismo, afortunadamente, pero sí que tendrás que hacer una inversión para autoeducarte de nuevo y comenzar a afianzar en tu interior nuevas ideas y comportamientos.
Pero si te pones a ello, haces tu parte y dejas que pase el tiempo, te aseguro que lo conseguirás.
Un fuerte abrazo.
Óscar Martín.
Tal vez te podrían interesar los siguientes artículos
- Cómo dejar ir. Claves para lograrlo y soltar la dependencia
- Relaciones tóxicas: que son y cómo tratar con ellas
- Cómo superar una ruptura de pareja. Aprendiendo del proceso
He leido muchos articulos, pero ninguno como este, realmente creo que me ayudo a entender el problema de mi vida, que es dar a los demas lo que yo necesito, pero como esperando que me traten igual, esto no pasa y me siento herida, me hundo, me deprimo y no se como continuar, ahora se que debo de redireccionar y esas buenas acciones hacerlas para mi, Cuidarme yo. Amarme yo. Hacer lo que yo necesito, si llegar a ser egoista.
Mil gracias por tu valoración del artículo. ¡Un fuerte abrazo!
Gracias por sus palabras, luego de leerlo sentí un profundo alivio, es que sentia un ahogo mental espantoso. Me resulta muy difícil dejar ir a alguien que llevo amando por 14 años con la misma intensidad que el primer día, me costaba dejarlo ir, pero luego de leerlo creo que tengo una luz en el camino que me tocará seguir. Gracias